Historia de un escándalo en tres actos: primero, Leticia Dolera inicia el rodaje de su próximo proyecto televisivo, Déjate llevar, producido por Movistar+; segundo, se filtra que una de las actrices contratadas originalmente, Aina Clotet, tiene que dejar el proyecto debido a su embarazo; y tercero, tras una semana de rumores, teorías, titulares y declaraciones de Dolera, Clotet publica su comunicado explicando todo lo sucedido.
¿Fue o no fue despedida por estar embarazada?
El comunicado. Según sus palabras, sí. Clotet explica que estaba embarazada de tres meses cuando recibió el papel, y que expuso su situación de inmediato a Dolera. Dado que el rodaje se extendería varios meses, el embarazo se haría evidente. Clotet propuso disimularlo de varios modos (vestuario, enfoques, planos, una doble de cuerpo e incluso destinar parte de su sueldo a los inconvenientes causados en el rodaje), pero Dolera lo rechazó.
Comunicado de Aina Clotet pic.twitter.com/Z5opyEdhLm
— aina clotet (@ainaclotet) 20 de noviembre de 2018
¿Por qué? Aquí entra la polémica. Clotet defiende que podría haber interpretado el papel tal y como se hace en otras series cuando una de las actrices espera un hijo. Dolera y el equipo de producción, en sus palabras, se excusarían en cuestiones técnicas: tanto en la imposibilidad de cambiar el plan de rodaje como en la gravosa póliza de seguro de la serie, que se dispararía en caso de contratar a una mujer embarazada.
Según Clotet, ni Dolera ni el resto del equipo de producción informó de la situación a Movistar+, la productora de la serie. "De haberlo sabido, hubieran volcado toda su voluntad para intentar evitar que esta situación ocurriera", pone en su boca.
¿Qué dice Dolera? Ha dado su versión en varias entrevistas. En Elle afirmó que el principal problema era artístico: el personaje de Clotet protagonizaba numerosas escenas de cama, incompatibles con un embarazo. En Fotogramas explicó que retrasar la producción a causa del embarazo retrasaría la serie un año, algo inasumible. En su lugar, Dolera ofreció a Clotet interpretar un personaje secundario. La actriz lo rechazó.
¿Por qué es polémico? Por un lado, porque la historia de Clotet encaja como un guante en las reivindicaciones históricas de las actrices. Al igual que en otros sectores, el embarazo representa un dilema en ocasiones inasumible para muchas mujeres, obligadas a elegir entre su carrera profesional y la maternidad. Es uno de los factores más determinantes en la brecha salarial, y una reivindicación histórica del movimiento feminista.
Por otro, por la propia figura de Leticia Dolera. La actriz se ha convertido en una de las figuras más destacadas del feminismo contemporáneo en España. Lo ha hecho, a menudo, desde una posición combativa, proyectando el mensaje feminista en la esfera mainstream, más allá del nicho. Resulta paradójico que sea precisamente ella quien haya despedido a una actriz por un embarazo.
La reacción. El escándalo ha servido para atacar a Dolera y, por extensión, a un fantasmal feminismo "de márketing". Numerosos actores y actrices han manifestado su apoyo a Clotet. Algunos, como Toni Acosta, han recordado que otras producciones sí se adaptaron durante su embarazo. Al margen de su defensa, lo más probable es que Leticia Dolera despidiera a Clotet por estar embarazada. Un espejo incómodo frente a su propio discurso.
Gracias Aina por este comunicado. He vivido dos embarazos trabajando en series de televisión. La primera hace 14 años, en UPA Dance (lo disimulamos) la segunda en #ElsindromedeUlises incluimos el embarazo en la trama. Las dos veces me cuidaron y mimaron. Siento pena. Mucha pena.
— Toni Acosta Oficial (@AcostaToni) 20 de noviembre de 2018
Imagen: GTRES
