A las pocas horas del atentado de Westminster, en el que un ciudadano británico convertido durante su vida adulta al Islam mataba a cuatro personas, se desataban dos reacciones contrapuestas: por un lado, la difusión de una imagen en la que una mujer con hijab paseaba con aparente indiferencia frente a un herido; por otro, la puesta en marcha de una campaña de donaciones por parte de una asociación musulmana en Londres.
¿Cuál llegó a los medios, a los timelines de Facebook y a los grupos de WhatsApp con mayor prontitud? La primera.
En aquel meme-viral-imagen-fuera-de-contexto se juntaban varias tendencias que ya habían aparecido en las redes sociales tras los atentados de París o Bruselas: la identificación de un grupo demográfico, los musulmanes, como los culpables implícitos de las matanzas. En realidad, la mujer sólo estaba caminando frente al cadáver como otros tantos ciudadanos londinenses cuya condición racial era menos evidente: consternada y confundida.
Del mismo modo que tuits o mensajes de Facebook se llenaban de comentarios indignados, surgían otros tantos que señalaban otras fotografías donde era posible identificar a ciudadanos blancos o asiáticos en la misma postura y actitud que la mujer del hijab. Esto es, que caminaban mirando o charlando por el móvil con un aspecto, a priori, indiferente. Un mero vistazo al resto de imágenes capturadas por el fotógrafo de Reuters revelaba que la foto viralizada no hacía justicia al verdadero estado de horror de la mujer.
Aquel fue el punto álgido de toda una cadena de memes, montajes y bulos sobre la comunidad musulmana en Europa que ha arrastrado a las redes sociales y a determinados medios de comunicación durante los últimos días. Acusaciones, comentarios xenófobos o ejemplos rampantes de islamofobia compartidos como la pólvora.
Una agresión falsa, una mujer con velo
Es bastante probable que te hayas topado con alguno de ellos en tu muro de Facebook o en uno de los muchos grupos de WhatsApp en los que compartes espacio con personas con las que tienes poca o nula relación en tu día a día. El último ejemplo, bastante popular en España y ya trasladado a Francia, es el de la supuesta reacción de un hombre musulmán en un centro de salud. En el vídeo se aprecia a una persona en actitud agresiva y dominante frente a una mujer trabajadora del centro.
El vídeo falso del musulmán q agrede en centro de salud español sigue viralizándose.
— MALDITO BULO (@malditobulo) 26 de marzo de 2017
Es Rusia.@SoydeDERECHAS tiene 800 rts
¿Nos ayudáis? pic.twitter.com/ml8GnU9dGj
¿El mensaje que acompaña al vídeo? "Musulmán dando las gracias por su acogida en Europa en un centro de salud español. Imágenes que TVE no difunde para no caer en la alarma social (...) Manda huevos, ¡nos van a comer con patatas!".
Lo cierto es que las imágenes no describen a ningún hombre musulmán atacando a ninguna trabajadora española. Como cualquier escucha del audio revela, las palabras proferidas por uno y otra no son ni árabe ni español, sino ruso. Y la realidad es que el vídeo se grabó en Nóbgorod, en Rusia, y que fue compartido por primera vez por Rustem Adagamov, un bloguero ruso, como bien se explica en El País. Otras páginas de FB como Spanish Revolution han tratado de contraatacar el viral con otro vídeo desmontándolo.
Pese a ello, son centenares de miles los visionados que acumula, contribuyendo a un estado de ánimo donde los musulmanes son colocados en situaciones violentas o agresivas y culpabilizados por acciones que no han cometido.
Los mensajes han proliferado poco después del atentado de Londres por un motivo evidente: casi todos los grandes ataques realizados en los últimos años en Europa han tenido como motivación última ideas extremistas dentro del radicalismo islámico. Bruselas, París o Niza son tres ejemplos de ello. Pese a las continuas denuncias de la población musulmana en Europa y a campañas de solidaridad como la de Londres, donde en un día se habían recaudado 20.000 euros para las víctimas, se ataca a las comunidades islámicas.
El caldo de cultivo, en un contexto de polarización deomgráfica e identitaria tanto en Europa como en Estados Unidos, con diversos partidos que hacen gala del rechazo a la inmigración o a las culturas no-cristianas y no-europeas cotizando muy alto en las encuestas, permite que los bulos o los memes xenófobos proliferen. Otro común, por ejemplo, es esta imagen, que se vale de la crisis en España y de la importante población inmigrante en el país para dibujar un presente donde los más válidos se van y los sospechosos migrantes vienen.
Aunque ha sucedido siempre, el clima político actual lo ha acrecentado.
Todos los memes que están circulando ahora
En @MalditoBulo han recopilado durante estos días todos los bulos o mentiras relacionados con la comunidad musulmana tras los atentados de Londres. Al conocerse la noticia, por ejemplo, comenzó a recorrer la historia de que el nivel de alerta nacional había ascendido al 5. Era falso y la Policía Nacional lo explicó poco después.
¡Que noooooooooooooooo!
— Policía Nacional (@policia) 22 de marzo de 2017
Que ni caso a las cadenas de whatsapp. Sólo fuentes oficiales. Seguimos en NIVEL DE ALERTA 4https://t.co/iRTO9hytp7 pic.twitter.com/DBhEI39OGY
Los virales-bulos abarcan temáticas de todo tipo. Otro popular ha consistido en la supuesta prohibición del Islam en Japón, un país que habría prohibido la nacionalidad a todos los ciudadanos musulmanes, que habría impedido la proliferación de la sharia, que habría limitado la importación del Corán o que habría reducido su número de embajadas en países árabes. Todo era falso, como se puede comprobar aquí o aquí, pero contribuyó a que muchos identificaran a Japón como "el ejemplo a seguir".
El origen del bulo es este meme falso:
— MALDITO BULO (@malditobulo) 24 de marzo de 2017
Aquí podéis leer máshttps://t.co/0x61y5MrAuhttps://t.co/3O1bAw6N4K pic.twitter.com/aXZPTRubfR
El propio alcalde de Londres se vio afectado por la dinámica de post-verdad, por definirla en términos recientes y familiares. Sadiq Khan es el primer gobernante de la ciudad musulmán, y descendiente de inmigrantes pakistaníes. Tras una interpretación sesgada y torticera de unas declaraciones a la televisión británica, diversos medios afirmaron que Khan consideraba "normal" que las ciudades grandes sufrieran atentados.
Mayor of London @SadiqKhan says these things are normal, so let's not worry about it #Westminster pic.twitter.com/1M58AWwXoO
— Defend Europa (@DefendEvropa) 22 de marzo de 2017
El listado es largo, e incluye ejemplos de imames inexistentes que llaman a la debilitazión de España por parte de los soldados de la yihad en su largo camino hacia la destrucción de la cultura europea hasta casamientos masivos de 500 niñas musulmanas que llevan circulando por la red desde hace casi una década. Todos desdibujan la realidad de los ciudadanos musulmanes en Europa y criminalizan de modo explícito o implícito a un grupo demográfrico al completo, contribuyendo a la xenofobia.
No. No hay ninguna prueba de que exista el imán Hukfhas al Hirazh o quiera debilitar España. Es un #bulo recurrente que circula desde 2007 👇 pic.twitter.com/5cmjQ0P70z
— MALDITO BULO (@malditobulo) 27 de marzo de 2017
De modo que, ¿cómo identificarlos? Si te lo estás preguntando, en el canal de Facebook de Maldito Bulo puedes encontrar un breve vídeo con seis claves para despachar un bulo rápidamente. Los elementos más importantes: el origen de la noticia (si el medio parece sospechoso, posiblemente lo sea), el tipo de titular empleado (si es demasiado espectacular e impresionante para ser real, probablemente lo sea) y si tiene más cobertura más allá del meme (los medios no "silencian", si no lo cubren es porque es falso).
Como siempre, el mejor modo de desmontar un meme es buscando información por uno mismo.