China, imperio que ha dominado el arte del disfraz, que hace unas réplicas en ocasiones simplemente brillantes. Ayer hemos descubierto un nuevo episodio en la historia de Harry Potter, y no hablamos de la reciente publicación de una adaptación teatral de la mágica saga, sino de las copias que ha sufrido en múltiples, demasiadas ocasiones el libro de J.K. Rowling.
Se estima que hay 15 millones de copias ilegales circulando en China de diferentes ejemplares la historia del Chico que Sobrevivió, pero la que más nos interesa es Harry Potter y Bao Zoulong. Con un título traducible a Harry Potter y el leopardo que se convirtió en dragón, esta es una secuela no autorizada de la saga, publicada en China en 2002, y que consistía en, básicamente, transcribir El Hobbit de Tolkien cambiando los nombres de lugares y personajes por los de los magos de Hogwarts. La portada es muy buena, también.
Pagaron una fianza y retiraron todas las copias que encontraron. Aún no se conoce la identidad real del “autor” de esta idea genial. Lo que sí ocurrió fue que circularon en lengua británica traducciones de los primeros episodios.
Y frente a lo que inicialmente podrías pensar, el libro se convierte en una mezcla tremenda que en ocasiones puede dar el pego. No es tan difícil de imaginarse a Gandalf como Dumbledore, a los Weasleys como tropel de enanos o que Voldemort sea una repugnante criatura que se ha ido corrompiendo con el tiempo y habla de sí mismo en tercera persona. Habría que prescindir de Hermione, que no nos encaja con ningún personaje. Bueno, igual con Baya de Oro, pero nos parece un poco turbio.
Harry Potter, esa criatura de la Comarca
No hemos encontrado textos originales del libro, pero no hace falta. Con El Hobbit en una mano y el amor por Harry Potter en la otra, las historias del mago adolescente como habitante de la Tierra Media nos las hemos imaginamos de esta forma :
En un agujero en el suelo, vivía Harry Potter. No un agujero húmedo, sucio, repugnante, con restos de gusanos y olor a fango, ni tampoco un agujero seco, desnudo y arenoso, sin nada en que sentarse o que comer: era un agujero para niños huérfanos, y eso significa comodidad.
—¡Vaya, ya estamos todos aquí! —dijo Dumbledore, mirando la hilera de trece capuchones, una muy vistosa colección de capuchones, y su propio sombrero colgados en las perchas—. ¡Qué alegre reunión! ¡Espero que quede algo de comer y beber para los rezagados! ¿Qué es eso? ¡Té! ¡No, gracias! Para mí un poco de vino tinto.
—Y también yo —dijo Bill.
—Y mermelada de frambuesa y tarta de manzana—dijo Percy.
—Y pastelillos de carne y queso —dijo Fred.
—Y pastel de carne de cerdo y también ensalada—dijo George.
—Y más pasteles, y cerveza, y café, si no os importa—gritaron los otros Weasleys al otro lado de la puerta.
—Prepara unos pocos huevos. ¡Qué gran amigo!—gritó Dumbledore mientras Harry corría a las despensas. ¡Y saca el pollo frío y unos encurtidos!
Aquí abajo junto al agua lóbrega vivía el viejo Voldemort, una pequeña y viscosa criatura. No sé de dónde había venido, ni quién o qué era. Era Voldemort: tan oscuro como la oscuridad, excepto dos grandes ojos redondos y pálidos en la cara flaca. Tenía un pequeño bote y remaba muy en silencio por el lago, pues lago era, ancho, profundo y mortalmente frío. Remaba con los grandes pies colgando sobre la borda, pero nunca agitaba el agua. No él. Los ojos pálidos e inexpresivos buscaban peces ciegos alrededor, y los atrapaba con los dedos largos, rápidos como el pensamiento.
Estaba a punto de dar un paso hacia el salón cuando alcanzó a ver un repentino rayo rojo, débil y penetrante, que venía de la caída ceja izquierda de Aragog. ¡Sólo se hacía el dormido! ¡Vigilaba la entrada del túnel! Harry dio un rápido paso atrás y bendijo la suerte de haberse puesto el anillCapa de invisibilidad. Entonces Aragog habló:
—¡Bien, ladrón! Te huelo y te siento. Oigo cómo respiras. ¡Vamos! ¡Sírvete de nuevo, hay mucho y de sobra!
Pero Harry no era tan ignorante en materia de acromántulas como para acercarse, y si Aragog esperaba conseguirlo con tanta facilidad, quedó decepcionado.
—¡No gracias, oh Aragog el Tremendo! —replicó el chico— No vine a buscar presentes. Sólo deseaba echarte un vistazo y ver si eras tan grande como en los cuentos. Yo no lo creía.
—¿Lo crees ahora? — dijo la araña un tanto halagada, pero escéptica.
—En verdad canciones y relatos quedan del todo cortos frente a la realidad, ¡oh Aragog, la Más Importante, la Más Grande de las Calamidades! —replicó Harry.
—Tienes buenos modales para un ladrón y un mentiroso —dijo el bicho—. Pareces familiarizado con mi nombre, pero no creo haberte olido antes.
Hay otros mundos de Harry, y son igual de buenos
Además de todo esto, los chinos también han imaginado a Harry Potter en otros mundos, que incluyen hechiceros asiáticos, personajes de Pixar y dinosaurios.
Harry Potter y la muñeca de porcelana
El argumento es el siguiente: Harry se entera de que Voldemort va a viajar a China para encontrarse con su némesis oriental, Yan Dao Mo, para de alguna forma poner en jaque el statu quo de la magia occidental. En la travesía Harry hará nuevos amigos, como Long-Long o Xing-Xing, miembros de un grupo de acróbatas chinos. Nadie sabe dónde están Hermione o Ron. Al final los amigos de Harry logran restaurar el orden y desbaratar los planes del que No Debe Ser Nombrado, pero… ¿logrará la muñeca de porcelana romper el maleficio de la luna llena? (?)
Harry Potter y la armadura dorada
Aquí sucede una cosa curiosa, un efecto mental que debería ponernos sobre aviso. ¿Aceptamos que haya un mundo con cuadros parlantes y personas que se transforman en monstruos y animales pero no uno en el que Harry vaya a lomos de un dinosaurio? Un poco de apertura de miras. En cualquier caso, la cosa va así: “Harry Potter se limpia la cara vigorosamente con las manos. Está tumbado en una bañera de porcelana, lavándose. Estamos ante un apuesto, culto chico. ¡No debería tener restos de tarta de queso en su cuerpo! Harry gruñe irritado, incapaz de quitarse completamente el pastel de su piel”.
Harry Potter y Beaker y Burn
Como no sabemos nada de su argumento, suponemos que Beaker es el triceratops de la portada y Flickr, el protagonista de Bichos, es Burn. Una posible interpretación es que se trata del año en el que instalaron televisores mágicos en Hogwarts y los muñecos de famosas ficciones infantiles saltaron a la vida. Quién sabe, tal vez también estén Oliver y Benji o Sonic paseando por ahí.
Harry Potter y la perla sumergida
Sí, otro crossover entre el mundo tolkiniano y el potteriano. Esta vez gracias al retorno de Gandolf (el primo de Gandalf) en el mundo de Hogwarts. El libro debe ser una libre interpretación, ya que Malfoy es aquí el mejor amigo de Harry.
Harry Potter y la gran masilla
Hay dos teorías sobre el por qué de este título y de esta aventura. Uno, que los fonemas suenan mejor en el chino original. Dos, se ha tratado de un pequeño malentendido, en el que el traductor ha confundido las alusiones a panza de Dudley y por lo que la historia arranca con Harry yéndose del hogar de los Dursley después de un duro verano de aguantar a su primo liándose con una stripper/danzarina del vientre. Pero bueno: "Tras volver a la escuela, Harry debe resolver el misterio de por qué todos los estudiantes se están transformando en taburetes de madera". Prometer promete.
Que el trasvase potteriano no cese
El tema de las falsificaciones literarias de Harry Potter es inabarcable. Hemos profundidado en las que venían de un país concreto, pero en realidad hay muchas más ahí afuera. Como puedes ver aquí, algunas de ellas también son muy sugerentes.
Pero volviendo con nuestro tema: la gente de Reddit también ha encontrado otra mina que relaciona el país del sol poniente con el mundo de Rowling. En este link puedes encontrar lo que ocurre cuando activas los subtítulos en inglés de un DVD chino de la película Harry Potter. Francamente, parece que alguien le dio a traducir del chino al inglés con Google Translate y acopló los tiempos de las frases. A su manera, también es otra pequeña otra maestra.