Si cada día más móviles disponen de funciones de reproducción de música, ¿por qué los reproductores no incluyen funciones de teléfono? Pues dicho y hecho, el Zipy Golfinho (curioso nombre) permite controlar algunas de las funciones de nuestro móvil desde el reproductor.
Lo hace mediante el protocolo Bluetooth, lo que le permite funcionar como un manos libres para el teléfono. Cuando recibamos una llamada, podemos pausar la música y atenderla directamente desde el reproductor, usando los mismos auriculares con los que estamos escuchando música.
Pero el protocolo Bluetooth se aprovecha también para otra función, la compartición de archivos, ya que permite el envío de ficheros entre dispositivos que lo soporten, ya sea el móvil u otro reproductor como este. Esto permite compartir música de forma sencilla, aunque de todos modos Bluetooth no es un protocolo que se caracterice por ser muy rápido, por lo que tampoco podemos esperar grandes velocidades de transmisión.
El Zipy Golfinho soporta la reproducción de música en ato MP3, WMA, WAV y Ogg Vorbis, con una autonomía, algo corta, de hasta 8 horas, y la reproducción de vídeo en AVI y MPEG-4, con una autonomía de 4 horas.
Su pantalla tiene un tamaño de 2 pulgadas y el reproductor una capacidad de 2 GB, incorporando un sintonizador de radio FM y unos altavoces integrados. Su precio es de 69.90 euros.