Los resultados financieros de Microsoft han sido destacables en casi todo, pero ha habido un apartado decepcionante: los ingresos por sus tablets convertibles Surface han caído un 26% respecto al mismo periodo del año pasado.
Los responsables de la empresa han dejado claro que este segmento es ahora más competitivo que nunca, pero lo cierto es que la verdadera razón de esa bajada es el hecho de que Microsoft tiene que renovar una línea que lleva sin mejoras desde octubre de 2015.
Necesitamos el Surface Pro 5, y cuanto antes mejor
Eso ha hecho que los Surface Pro 4, aunque interesantes, no resulten ya competitivos en algunos apartados con nuevos modelos de otros fabricantes que han querido atacar este segmento para hacer tanto portátiles convertibles (como el Dell XPS 13 2 en 1 o el HP Spectre) como tablets convertibles (Acer Switch Alpha 12, Huawei Mate Book).
Eso sin contar a nuevos candidatos en otras plataformas, como los iPad Pro y desde luego los Chromebooks que también roban interés al concepto original de Microsoft. Las ventas han pasado a ser de 831 millones de dólares en lugar de los 1.100 millones que se ingresaron en el mismo trimestre de 2016.
Es probable que Microsoft tenga aún estos problemas en los próximos meses: no se espera una renovación hasta el otoño, cuando puede que sí veamos un Surface Pro 5 adaptado a los nuevos tiempos.
Vía | Engadget
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