Las máquinas recreativas desataron una auténtica fiebre en la década de los 80 y 90 hasta que los ordenadores y, sobre todo, las consolas de sobremesa, acabaron con su reinado.
Muchos de los que nos dejamos los cuartos en aquellos salones recreativos de antaño hubieramos dado un brazo por poder tener nuestra propia recreativa en casa. Ahora, una empresa española llamada Bricoarcade hace realidad ese sueño.
Bricoarcade es el proyecto de un grupo de emprendedores que auna a Informáticos, diseñadores y carpinteros. Las máquinas recreativas que venden son idénticas a las de nuestra juventud en su forma, pero dentro albergan un monitor y ordenador actuales equipados con emuladores de nuestro juego favorito.
Los mandos, eso sí, son los tradicionales de las recreativas para dos jugadores, con joystick y botones cóncavos de 28 milímetros tipo americano.
El modelo básico de Bricoarcade es tipo Bartop, o sea, para poner en una barra o mesa. Una extensión opcional permite convertirlo en una máquina recreativa de tamaño y altura estándar para jugar de pie.
Bricoarcade ofrece la posibilidad de personalizar la máquina con diseños o ilustraciones a nuestro gusto. Las máquinas que venden no tienen sistema de monedas pero la empresa ofrece personalización completa en caso de pedidos especiales para los que quieran dar un toque retro a su local. El precio del modelo básico (sin ordenador) es de 350 euros. Una máquina completa, programada y personalizada cuesta 850 euros.
Más información | Bricoarcade
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