Una vez pasada la compleja fiebre de las tres dimensiones, los fabricantes y el mercado de la electrónica han fijado su próximo objetivo: la resolución 4K, cabeza de la próxima alta definición que está por llegar.
Esta feria IFA 2012 ha corroborado esa apuesta junto con el uso de la tecnología OLED para las pantallas. No hay ya marca que quiera pasearse por una feria de electrónica y no tener en sus llamativos puestos una de estas pantallas de grandes diagonales y resolución inabarcable ahora mismo para los contenidos habituales.
Si todavía estamos esperando a que el contenido 3D llegue a nuestros televisores, creo que el 4K tiene que ponerse a la cola.
Uno de los primeros televisores con resolución 4K que conocimos fue el Toshiba 55ZL2. Es un televisor que recorta la diagonal a unas sensatas 55 pulgadas, y le añade el efecto 3D sin gafas. En nuestra toma de contacto con este modelo ese efecto 3D nos dejó fríos, pero la próxima alta resolución hizo que nuestros ojos lloraran de alegría.
Su precio, por cierto, es de 9.000 euros. En este IFA 2012, la compañía ha anunciado que la gama se amplía, y a partir de 2013 veremos también un modelo con diagonal de 84 pulgadas y el nuevo procesador CEVO Engine 4K.
LG se ha traído a IFA su flamante pantalla 4K a la que ha llamado LG Ultra HD Smart TV 4K. En el caso de los coreanos, la diagonal escogida es la más habitual para esta definición, 84 pulgadas, como lo es también su precio, cerca de 18.000 euros. Sale a la venta a partir del mes que viene y será Cinema 3D con mando Magic Control.
Otra marca que se apunta a la moda de los televisores 4K es Sony, que por fin ha presentado en Berlín su rumoreado modelo con resolución 4K. El diseño de su pantalla es la más diferente, pero la diagonal … ¿adivináis? … sí, 84 pulgadas donde las barras de sonido integradas son protagonistas especiales. Llegará a finales de año pero sin precio definido todavía.
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