Microsoft siempre ha cuidado a la Gamescom, la feria de videojuegos que se celebra en Colonia todos los años en el mes de agosto. Aunque pueda parecer como un evento eclipsado por el E3, los de Redmond se reservaron unos cuantos lanzamientos para este evento y hoy los hemos conocido.
Hubo tres grandes ausencias en Los Ángeles el pasado mes de junio: Quantum Break, Crackdown 3 y Scalebound. ¿Había algún problema? En absoluto, Microsoft se ha guardado estos títulos para enseñarlos en Alemania y dejarnos respirar un poco. Ahora, por fin, los hemos visto y son alucinantes.
Quantum Break, el deseado se deja ver
Muchas expectativas alrededor de Quantum Break. Un juego diferente que en su día nos vendió la idea de que podríamos viajar en el tiempo, ralentizarlo y usarlo a nuestro gusto para superar los diferentes retos que nos iban poniendo. Hoy por fin hemos podido verlo en movimiento y pinta muy bien.
Ya sabíamos que no iba a llegar este año y que se iría a 2016. Efectivamente, pero no tendremos que esperar mucho ya que el 5 de abril se pondrá a la venta en Xbox One. Muy buena pinta a simple vista, aunque con el miedo de que la mecánica se vuelva un poco repetitiva según avancemos.
Crackdown 3, igual de macarra que siempre
Hay juegos por los que pasa el tiempo y su esencia no cambia. No había dudas con el nuevo Crackdown y todo apuntaba a que iba a mantener ese encanto de juego desenfadado donde la destrucción de todo lo que teníamos por delante iba a ser la clave.
Por desgracia no hemos podido ver muchos detalles y, de momento, solo sabemos que llegará el año que viene. Esperemos que Microsoft muestre algo más a lo largo de la Gamescom pero de momento ha sido el que menos se ha dejado ver de los tres. Una lástima.
Scalebound, dragones, espadas y música tecno
Scalebound, de Kamiya y su estudio, pintaba realmente bien en el video que mostraron el año pasado en el E3. Sin embargo, no hemos visto gameplay hasta ahora. Todo apuntaba a que iba a ser una curiosa combinación de elementos roleros con hack and slash al estilo de Devil May Cry. En lo que hemos visto no parece que vaya a tener un ritmo tan frenético pero podremos pelear con un dragón gigante a nuestro lado.
El toque de juego de rol estará muy presente: un ritmo algo más lento y la aparición de cifras cada vez que realizamos un golpe para indicarnos el daño que hacemos. Eso no significa que no sea rápido pues las transformaciones y los combos estarán muy presentes.
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