Motorola, una compañía legendaria en esto de la telefonía móvil que ha pasado por las manos de Google y ahora está establecido en China bajo la protección de Lenovo, es bajo mi punto de vista la gran artífice de que en este 2015 vayamos a ver la que seguramente sea la mejor generación de terminales de gama de entrada y media.
El éxito de su Moto E y sobre todo de su Moto G ha animado a las compañías que, salvando las que han entrado ahora en el mercado de la telefonía libre, no habían prestado especial atención a estas gamas, viviendo demasiados años de las rentas y el nombre. Pues ha llegado la hora de mover ficha. Y el primer gran terminal que llega con el objetivo de volver a reinar en la gama de entrada es el Moto E 4G. Toma nota de lo que un smartphone de 129 euros nos puede ofrecer hoy en día.
Nuevo Motorola Moto E (2015): un poco más de todo
Como ocurrió con el Moto G 2014, la renovación del Moto E ha sido tranquila. Si algo funciona, ¿por qué estropearlo con experimentos? El nuevo Moto E va a ofrecer una combinación que, dentro de la gama de entrada, nos parece ideal.
Su pantalla es de 4.5 pulgadas, creciendo un poco desde las 4.3 pulgadas del modelo presentado en mayo del año pasado. La resolución no cambia y se queda fija en los 540x960 píxeles (qHD), más que suficiente. El panel lógicamente no va a ser un AMOLED ni IPS de última generación, pero como en el del Moto E del año pasado, la respuesta será correcta en la mayoría de situaciones, aunque el brillo no abrumará en exteriores. La protección no se ha descuidado y es Gorilla Glass 3.
El procesador es ahora un cuatro núcleos de Qualcomm 410 a 1.2 GHz (MSM8916), con 1 GB de memoria RAM y algo que nos alegra mucho y era necesario: dobla la memoria interna de serie hasta los 8 GB. No es una cantidad de la que pueda presumir pero sí que se agradece en época de muchas fotos y grupos de mensajería ansiosos por compartir contenido. Si lo necesitamos podremos acudir a su ranura para tarjetas microSD, que admite hasta 32 GB extras.
En la parte multimedia, la cámara de fotos principal mantiene los 5 megapíxeles pero hay novedad en la frontal. Ahora sí que tenemos una ahí, y ya adivináis con qué propósito, aunque nos quedamos con calidad VGA.
En la batería es otro punto donde el nuevo Moto E da la talla. Son 2390 mAh con los que no debería haber problema alguno en llegar al final del día combinada esa capacidad con el resto de especificaciones.
Robustez, conectividad y precio, sus otras armas
En una gama como la de entrada, la sensación de robustez me parece una condición imprescindible. Aquí no hay que buscar materiales más nobles, ni el grosor o peso mínimo. El día a día pasa factura. Así que el nuevo Moto E, con el aumento de pantalla que adopta, no mejora las dimensiones. En peso, por ejemplo, sube muy ligeramente hasta los 142 gramos.
Se hace eso sí más delgado, con 11.9 milímetros, pero a cambio aumenta de altura y de anchura hasta los 130 y 67 mm respectivamente. En mano y por su diseño, tiene pinta de que siga como un terminal capaz de resistir casi todo, y el diseño no está nada mal. Los colores volverán a ser uno de puntos de atracción, aunque por ahora se ha confirmado solo el color negro y blanco.
Otra novedad esperada pero que por ello no deja de sorprender en esta gama es la inclusión de conectividad 4G/LTE (cat 4). Esto le ayudará en los catálogos de las operadoras. Y luego está claramente el precio. Además, y no cualquiera puede presumir de ello, llega al mercado de serie con Android 5.0. Fíjate en la comparativa con otros gama de entrada con los que compite.
Motorola Moto E, precio y disponibilidad
La compañía ahora en manos de Lenovo no ha querido esperar al MWC 2015 para presentar su gran baza en la gama de entrada y el Moto E es una realidad. Los nuevos modelos, en blanco y también en negro, empiezan a venderse desde ya a 129 euros.
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