Las mesillas de noche y los escritorios se han convertido en el espacio perfecto para cargar todos los dispositivos que los amantes de la tecnología utilizan en el día a día. El problema: para quien carga en un mismo lugar su teléfono móvil, los auriculares inalámbricos y el reloj inteligente, también se ha podido convertir en un infierno.
No son los primeros pero sí ofrecen una de las soluciones más elegantes y simples para poner al día la batería de todos nuestros dispositivos. Tesla ya ofrece en su web el Wireless Charging Platform, un interesante cargador inalámbrico con espacio para hasta tres dispositivos.
Para tenerlo disponible, todavía será necesario esperar hasta febrero de 2023 pero ya conocemos todas las especificaciones que ofrece Tesla con esta alfombra de carga inalámbrica que cuesta 300 dólares y que ya se puede comprar.
Carga de cualquier manera hasta tres dispositivos
Al contrario que otros cargadores del mercado, donde teléfonos móviles, relojes y auriculares tienen su espacio propio y se apilan en diferentes alturas, este cargador de Tesla es una alfombra sobre la que dejar los dispositivos de cualquier manera.
Con tecnología iQ, la posición en la que dejemos los dispositivos electrónicos no es un problema, pues la carga inalámbrica estará en funcionamiento siempre y entregará hasta 15 W de potencia por dispositivo conectado. Es una opción ideal para quien, por ejemplo, necesita cargar dos teléfonos móviles de forma simultánea.
La alfombra de carga se puede situar en dos posiciones (completamente recta e inclinada) está terminada en Alcantara y rematada en aluminio en un diseño que, según la firma, está inspirado en el Tesla Cybertruck, el gran pick-up de Tesla que está sufriendo algunos retrasos. Para ponerlo en funcionamiento, lleva incluido un cargador de 65 W de potencia, con un adaptador de corriente USB-C.
Los compañeros de Applesfera explican que este nuevo accesorio tiene el problema de que no es capaz de cargar el Apple Watch, que necesita de unas bobinas especiales de tamaño muy concreto para poder llenar su batería. Es una de las pocas pegas que le puede poner al cargador una persona que esté dispuesto a gastarse 300 dólares en cargar la batería de sus dispositivos.
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