Nos acercamos a los 2 euros por litro de gasolina. Un precio histórico. El más alto nunca visto. Sin embargo, el precio del petróleo estuvo más alto en 2008, cuando el barril de Brent superó los 140 dólares en plena crisis financiera. No se descarta que aquella barrera vaya a superarse estas semanas, pero llama la atención como el precio de la gasolina bate récords, mientras que el del petróleo todavía no. ¿A qué se debe esta diferencia? Os lo explicamos.
Estrechamente ligados pero no iguales. El precio de la gasolina y el del petróleo están muy ligados. Cuando sube uno sube el otro, pero también hay disparidad en porcentajes y nivel de precios final. El precio de los carburantes depende de múltiples factores más allá del precio del propio petróleo. Aquí se incluyen los impuestos, los márgenes y el coste de la logística.
Lamentablemente para nuestros bolsillos, cuando el precio del petróleo cae en picado, este no se representa de manera tan evidente en el precio de la gasolina. Ocurrió el año pasado durante el confinamiento. Mientras el barril de Brent se desplomó un 60%, la gasolina solo bajó un 17% según datos del Boletín Petrolero de la Unión Europea.
Cuáles son los "costes invisibles". Con un coste del precio del crudo similar, los precios de la gasolina hoy en día son mucho mayores. Esto se justifica por los nuevos impuestos que se aplican. Son los conocidos popularmente como "costes invisibles", esos que no tienen directamente que ver con la logística o la producción, sino que están relacionados con materia legislativa como penalización en beneficio de energías menos contaminantes e impuestos especiales.
No hay datos actualizados oficiales de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC). Para conocer cómo se aplican los impuestos tenemos el informe de la Asociación Española de Operadores de Productos Petrolíferoas (AOP), quien explica que el 49% de lo que se paga en España por litro de gasolina son impuestos. El 35% son costes al por mayor y el 16% son márgenes y costes de distribución.
No hay consenso sobre los márgenes de las gasolineras. Según los últimos datos de la CNMC recogidos por El País, de 2013 a 2020 se pasó del 11% al 21% en el concepto de ganancia neta de las gasolineras, lo que incluye costes de operación de las estaciones de servicio y las obligaciones normativas. Según argumenta la patronal de las gasolineras, su beneficio es de solo el 2% de lo que se paga. La diferencia del precio de la gasolina sin embargo es muy diferente entre una gasolinera y otra, siendo mayor todavía entre las distintas comunidades autónomas.
El Impuesto Especial de Hidrocarburos sobre los biocombustibles y otros cambios desde 2008. En 2008, cuando el Brent alcanzó su máximo, no había una serie de impuestos que hoy sí existen en España. Por ejemplo en octubre de 2014 se creó el Fondo Nacional de Eficiencia Energética, que aplica a los grandes operadores. Su impacto sobre el precio final se estima en unos 2,4 céntimos sobre el litro de gasolina.
También estaba el Impuesto Especial de Hidrocarburos sobre los biocombustibles donde se estableció un impuesto de 48 euros sobre cada 1.000 litros en el gasóleo o la gasolina. Es decir, una repercusión de casi cinco céntimos extra por litro.
En los presupuestos de 2018, finalmente se decidió aplicar un impuesto especial único, donde en todas las Comunidades Autónomas se paga un impuesto de 7,2 céntimos por litro. Una misma cantidad para la gasolina y el diésel que no se ha modificado desde entonces.
En España pagamos un 5% menos de impuestos por la gasolina que la media Europea. Según los últimos datos de un informe de la Comisión Europea, los impuestos representan en España un 47% sobre el precio de la gasolina, bajando desde el 57% de 2018. Esto supone un 5% menos que la media de la Unión Europea (52%). Según este estudio, con cada litro de gasolina pagado a 1,59€, en España se recaudan unos 75 céntimos.
En Xataka | Gasolina 95, diésel o 98 octanos: qué pasa si me equivoco al repostar de combustible
Ver 46 comentarios