Aunque es relativamente cierto que la humanidad jamás ha estado tan en paz como ahora, también lo es que en un buen puñado de rincones del planeta se siguen librando batallas incruentas por el control político de un territorio o por el exterminio de una etnia o grupo racial rival. Y la mayor parte de ellos, ya sea por lejanía o por alargamiento en el tiempo, apenas tienen sitio en los medios de comunicación.
Lo que no significa que no sean reales y que no tengan consecuencias devastadoras para las poblaciones que los sufren. De modo que, ¿qué mejor que un mapa para de un sólo vistazo explorar todos los conflictos bélicos que asolan al planeta? No son pocos y cada uno varía en magnitud, por lo que desde IRIN, una agencia precisamente dedicada a cubrir la información de las regiones del mundo que el resto de medios tienden a ignorar, han hecho un útil mapa explicativo.
No es muy espectacular visualmente, pero sí muy rico en información y en detalles. En la gráfica, que podemos ver a continuación, se incluyen todos los conflictos bélicos que siguen vivos en la actualidad. Hay de todo: desde escaramuzas recientes entre estados rivales en Asia o África hasta largas guerras latentes pero aún no terminadas como la de Corea, que virtualmente sigue sin haber terminado y que enfrenta de forma permanente a las dos Coreas.
El mapa forma parte del proyecto Forgotten Conflicts de IRIN, y sirve para llamar la atención sobre esos otros lugares del mundo a los que nunca miramos. Algunos ejemplos: la guerra contra los tuaregs auspiciada por el Gobierno de Mali desde 2012 y que implica a tropas internacionales sobre el terreno; la guerra de Filipinas contra el Frente Moro Islámico de Liberación en Mindanao; la lucha por Nagorno-Karabaj en Azerbaiyán y Armenia; o la eterna guerra de Somalia.
El tamaño de los circulitos varía en función de la longevidad de los conflictos. Los más viejos datan de la resaca de la Segunda Guerra Mundial: el ya citado en la península de Corea, la interminable lucha por el control de Cachemira entre Pakistán, la India y China o la batalla por los territorios de Cisjordania entre la autoridad palestina e Israel. A estos habría que sumar la larguísima guerra civil del Congo, muy cruenta, o los conflictos internos de Colombia y Myanmar durante casi 70 años.
Otros son más recientes, como la guerra del Donbass que enfrenta a Ucrania y a grupos independentistas apoyados por Rusia; el conflicto de Siria, quizá el avispero más peligroso del mundo en la actualidad; la guerra civil de Sudán del Sur (dentro del conflicto irresoluble en todo el Sudán); el ascenso de Boko Haram en Nigeria; o el conflicto de Xinjiang, recientemente avivado.