Europa adora viajar en tren. Incluso cuando la geografía se empeña en impedirlo. Ocurre con el túnel del canal de la Mancha, con los túneles del Mar Báltico y con el túnel de San Gotardo, hasta la fecha el túnel ferroviario más largo y profundo del mundo. Inaugurado en 2016, San Gotardo mide 57 kilómetros y se creó para facilitar el paso bajo los Alpes. Ahora, la Unión Europea quiere dar un paso más.
Como parte del corredor Escandinavia-Mediterráneo que va del norte al sur de Europa y medirá más de 4.000 kilómetros, la Unión Europea financiará la construcción de este nuevo túnel bajo los Alpes que esperan tener listo en 2028.
8.000 millones de euros para mejorar la circulación en tren bajo los Alpes
La conexión entre Múnich y Verona supone actualmente un cuello de botella. Con la nueva vía esperan agilizar la conexión entre el norte y el sur de Europa. Se trata del túnel ferroviario de base Brenner, que junto al actual de San Gotardo y la futura conexión Lyon-Turín, permitirá que los Alpes sean mucho más transitables de lo que lo son en la actualidad.
El comienzo de las obras empezó ya en 2008, aunque no fue hasta 2015 cuando se iniciaron las excavaciones. Ahora se ha empezado a construir el sistema de tres túneles que servirá para que los trenes del corredor puedan circular.
Las cifras del proyecto impresionan. El túnel tiene un presupuesto de 8.384 millones de euros y la longitud total desde la circunvalación de Innsbruck hasta Fortezza/Franzensfeste será de 64 kilómetros, convirtiéndolo en el túnel ferroviario más largo del mundo.
Aunque todo sea dicho, la distancia total y el título de túnel más largo está en disputa junto al propio túnel de San Gotardo (55 km) y el túnel entre Lyon y Turín (57,5 km), debido a que la longitud total depende de las secciones que se cuenten. Si no se tiene en cuenta la circunvalación de Innsbruck, el túnel de Brenner seguirá siendo una monstruosa perforación de 55 kilómetros de largo.
El túnel tendrá una apertura con un diámetro de 8,1 metros, con una separación entre los distintos túneles de 70 metros. Teóricamente, los trenes podrán circular a una velocidad de hasta 250 kilómetros por hora con pasajeros y de 120 km/h con mercancías.
Este colosal corredor Escandinavia-Mediterráneo está considerado uno de los nueve ejes prioritarios de la Red Transeuropea de Transporte y una vía crítica para mejorar el paso de mercancías en Europa.
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