Aunque Bill Gates ya está retirado de la primera línea de Microsoft, el millonario se mantiene muy atento a la vanguardia tecnológica al frente de la Fundación Bill y Melinda Gates a la que el magnate de la tecnología prometió donar el 99% de su fortuna.
Ya es tradicional que a finales de año, Bill Gates publique una carta con propósitos para el año nuevo en el ámbito tecnológico, analizando qué innovaciones deberían desarrollarse en los próximos años y su impacto en la sociedad.
En su misiva para 2024, Gates da todo el protagonismo a la inteligencia artificial y cómo, desde la fundación que creó con su exesposa Melinda, ha descubierto todo el potencial de esta tecnología para solucionar muchos problemas sanitarios, educativos y sociales que actualmente se encuentran estancados por falta de recursos.
El abuelo Bill y el mundo que deja a las generaciones futuras. Bill Gates acaba de ser abuelo, y ese hecho ha centrado buena parte de las reflexiones del millonario sobre el mundo en el que tendrá que vivir la generación de su nieta. Gates se muestra un poco defraudado porque no está usando la IA tanto como imaginaba en su día a día. "Pensé que usaría herramientas de inteligencia artificial para las revisiones estratégicas de la fundación este año, que requieren leer cientos de páginas de materiales informativos", admite Gates en su carta, pero "terminé preparándome para ellas de la misma manera que siempre lo hago".
En cualquier caso, Bill Gates predice un "punto de inflexión" en 2024 con avances en la IA y varios otros campos. En su carta, el millonario equipara el momento actual de la inteligencia artificial a la llegada de Internet a principios de los 80, y su rápida expansión en los 2000.
"Al principio, probablemente no conocías a muchas personas que lo estuvieran usando. Pero se volvió más común con el tiempo hasta que, un día, te diste cuenta de que la mayoría de las personas tenían direcciones de correo electrónico, compraban cosas en línea y usaban motores de búsqueda para responder sus preguntas".
Bill Gates ve en la IA una herramienta para abordar las desigualdades socioeconómicas, mejorar el acceso a la educación y la salud mental y reducir las desigualdades globales en las generaciones futuras.
Inteligencia artificial que salva vidas con pocos recursos. Desde su atalaya de la Fundación Gates, el millonario ha podido seguir de cerca durante los últimos años distintos proyectos sanitarios en los que la innovación y la intervención de la inteligencia artificial está teniendo un impacto directo en países con pocos recursos.
Gracias a estas herramientas se ha conseguido combatir enfermedades resistentes a los antibióticos proporcionando sugerencias sobre el mejor fármaco, dosis y duración, así como mejorando el diagnóstico precoz en embarazos de riesgo y al tratar enfermedades como el VIH, donde el tabú y presión social pueden ser un obstáculo fácilmente salvable con un chatbot. "Podemos aprender mucho de la salud global sobre cómo hacer que la IA sea más equitativa. La lección principal es que el producto debe adaptarse a las personas que lo utilizarán" señala Gates en su carta.
IA para formar a las nuevas generaciones. En su carta, Gates se muestra optimista sobre el papel de la IA en proyectos educativos que proporcionan herramientas educativas a alumnos en países sin recursos como Khanmigo, desarrollada por Khan Academy, o MATHia.
El fundador de Microsoft destaca cómo la IA puede ayudar a ofrecer "a cada niño la misma oportunidad de sobrevivir y prosperar", y destaca la importancia de las inversiones en IA para hacer el mundo más equitativo y llevar tecnologías innovadoras a quienes las necesitan más rápidamente.
Mirando al pasado y al futuro. Bill Gates reflexiona sobre los logros conseguidos en las últimas dos décadas, y destaca con orgullo la gráfica descendiente de la mortalidad infantil antes de cumplir los cinco años. Uno de los principales motivos por los que creó la Fundación Bill y Melinda Gates.
"Mi historia de innovación favorita, sin embargo, comienza con una de mis estadísticas favoritas: desde 2000, el mundo ha reducido a la mitad el número de niños que mueren antes de cumplir cinco años. ¿Cómo lo hicimos? Una razón clave fue la innovación".
No obstante, Gates es consciente de los grandes desafíos que quedan por cumplir: la desnutrición, el calentamiento global y la crisis energética. "A menudo me preguntan qué elegiría si solo pudiera resolver un problema. Mi respuesta es siempre la desnutrición. Es la mayor inequidad en salud del mundo y afecta aproximadamente a uno de cada cuatro niños".
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Imagen | Securityconference.org
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